miércoles, 5 de diciembre de 2012

Doy terminada mi obra. Espero haber sido de gran provecho


Ya te mostré vida, obras y sobras
ahora acércate y escucha 
luz breve te di, más las obras

corren por ti ahora
ve, busca la virtud de Amor
que ya es tiempo y hora

Ve toma guía, yo te mostré
a Virgilio y Beatriz de virtud nata,
por ellos al Paraíso entre.

Maquinaria Solar


Ante mi se figuraba una extraña maquinaria, flor brillante y omnipresente
Sargazos salían de su botón, con los que impregnaba los orificios receptores
A las centellas con las que su raíz giraba, líneas que encienden el vientre

Beatríz líquido estelar en mis ojos, dijo: que estas luces de memoria carecían
En la tierra otra cosa era dicha, parte de la miseria de las moscas disfrazadas...
Pues las piezas por las que el cielo funciona, con tan solo ver el origen engrandecían.



Melodía final

I
Y es por eso que sin esperarlo,
he dado al hombre obsequios
para que su ser sea recordado

Desde lo natura de su habla,
pasando por sus actitudes,
espero todo sirva a su alma.

Pues la vida tiene examinada
todo hombre que aún respira
mejro tenerla encaminada.

II
Esto es por eso que aprovecho mis dotes
que me permiten acercarme a ustedes
mediante palabras contrarrestar nuestros  errores

Espero no se me juzgue luego
De ser calumniador de lo actual
Poco eso les debe importar

Mi  mensaje es para ustedes muy sincero
Considérenlo  mejor  un buen consejo
Pues sólo quiero mirarlos al final entre lo eterno

Créeme cuando digo que el hombre
Debe vivir con los pies sintiendo el suelo
Pero nunca con la vista descuidar el firmamento

Ten presente hermano cuando respires
Que debe quitarte el aliento lo bello de un cisne
Y no dejarte llevar por las pasiones pueriles.

 También cuida de las cosas que dices
Pues la lengua suele ser espada y escudo mejores
De quienes será su alma inmortal  al irse


Mi presencia en el rimto del blues

Un ego demoniaco, dos tragos, una mujer 
un cuarto subterráneo para estar lejos de Dios  
la cara finisima de mi soledad 
el mapa de mis vidas, el portavelas para alumbrar. 

Viene Dante a darme que hacer 

salir a las calles, buscar un amor 
mi planta de luz, mis ganas de ser 
una razón por simple que sea 
con tal de no cortarme las venas. 

Autor: José Cruz Camargo



Postludium luminiscente


El silencio mi cabeza abrazaba, partícula que se encogía
Entre los labios lentos de los sabios, ángeles y ancianos
Rápido el vacío se disipaba, elevando el fin de la sinfonía

Frente a mis ojos estuvo la semilla de las raíces luminosas
La melodía a su cúspide había llegado, las notas eran altas
Cuán grande es el olvido ante la luz, explosiones grandiosas.


Primera vista al cielo del Paraíso

Sobre una roca flotante entre las nubes, acariciaba la voz de mi amada,
Ella sonríe y arruga los ojos ante el oro líquido que se evapora entre zafiros
El mar celeste se rompía en el risco, el pelaje del león en el aire volaba,

Siento mi cuerpo desplomarse entre la brisa, el ojo cósmico me deslumbra
Entre los rayos y el andar de los peces voladores su cabellera se extravía
Espiral que colisiona en el cuerpo de la gema, que desvanece a la penumbra.

Sciortino - Amor che ne la mente mi ragiona

Amor, llegas preciso a mis ojos.
ahora déjame sólo con Beatriz.
ya con ella mi cuerpo tira despojos.

Has visto aquí lector la directriz
de cantos glorioso en pos de Amor.
Comparables al canto de codorniz.

Atento solo son por mor
de Dios, y exaltar la belleza
de mi amada que ahora es guía de amor

Un nivel más te espara ver en alteza
de estrellas es, confuso tal vez.
la cautela está contigo para tal dulceza

La rueda rota arrastra al abismo...


¡Oh! Excelsa ave cósmica que llevas en tus manos los pútridos clavos
De la casa tuya, que es regida por larvas paridas del veneno y la farsa
León lacerado por las arterias de tu oro, los simios brincan excitados

Ya la rueda rueda de mármol se ha roto, por la dualidad al ser enjoyada
Tiembla la tierra, las islas flotantes se desmoronan y tres perros aúllan
La serpiente sale de las entrañas, con siete brazos a la meretriz arrasaba.

Los sombríos sonidos del inframundo


Oh fiel compañera del dios de los zafíricos ojos
Condenada fuiste por las espinas de las flores
Reinas el inframundo con atributos hermosos.

He bebido de las aguas del olvido


A mitad de sagrado bosque, seguía el camino iluminado
Maravillado por las cosas que parecían para mí ofrecidas
Descubrí el Leteo y el Eunoe, mi espíritu sentía extasiado

¡Bebe! Me instó Matelda, mujer de mirada fulgorosa
Como sólo aquella a la que amo resplandecer podría
Así lo hice, bebí  para hallar la verdad esplendorosa

¡Sagrado cáliz! Que a mi alma vida nueva has otorgado
Al instante olvidaba mis  angustias, los temores, las nostalgias
Virtud renovadora, claridad desconocida, nada era imaginado.


Más música de mi obra


Oír el sonido estridente de mi obra,
siglos posteriores quieren saber
de mí todavía, trasformando mi palabra.

Miserere


Oyes tú la canción de miserere,
altivo canto va en boca de sombras
contemplando su senda cual sin títere.


"In extintu" Salmo 113


Aunque vagos recuerdos me traía el contemplar
Nuevamente similar escena, me alegro y miro
La diferencia se me abría como nueva y sin par

Escucho “in extintu” por las almas expresada,
Todas en espera del viaje rumbo al Purgatorio
El salmo que en su fervor no era por nadie olvidada

Te Deum Laudamus


Cánticos sagrados las paredes
del Purgatorio resuenan en ecos
los pacientes reforman sus mercedes. 

Pater Noster


!Oh! Amor, a ti cantos dulces
te dedicamos, nuestros feroces e impíos 
espíritus calman sed al ir aquellos sones.



Agnus Dei


Gran cordero por ti vid 
se volvió sangre sagrada 
y carne cuerpo de algún ardid.


Purgatorio: Avistamiento de la Montaña Bermeja


Fuera de la caverna los lamentos cesaron y en su lugar las estrellas brillaban
Al ritmo del son de las hebras de una mujer de piel árborea, los riscos se iluminaron
¡Oh montaña de piel escarpada y bermeja, la sangre y el bronce en ti se impregnaban!

A mi maestro seguía por aquella vereda, cuando de pronto con su dedo señaló
A las gacelas que alrededor de una pira danzaban, ¿Qué ánimas son éstas?
Y el maestro me respondió: Seres que al derramar sangre se harán ciervos solares


La barca: llegada al Purgatorio

De nuevo en otra barca
vamos rumbo a noble tierra
han notado peso que es marca

de vida, ¡apresurad! en esta tierra
gritan, sueños veo decirme
de virtuosos que en tierra

algún desliz no firme
los hace girar en tal montaña
y de platica no quiero irme 

Eh aquí un video del mi infierno y los colores que ahí emergen

Con esto viste almas sufriendo
contempla pues mejor tu senda
si no quieres terminar ardiendo

Ahora subo más alto y deja la rienda
del caos debajo en oscuridad
mira las luz que te encomienda. 


Luzbel (Infierno).

 

Tras mi guía andaba por el gélido sendero de una estrella teñida de azul pálido
Tierras muertas donde los gritos no logran quebrar la gruesa capa del silencio
Crustáceos inmóviles sobre la costa, miradas sin brillo, se respira un hedor pútrido

Escurre la carne pestilente de los dientes de sus tres rostros, solloza amargamente
Mientras despelleja al ave que por desventura sus plumas llenó de hollín...
Bestia hundida en el fulgor negruzco, descarnada por los antílopes eternamente

Cabezas


Creo haber escuchado el mar, más recibo sólo el vestigio de su grandeza
El viento gélido mi rostro ha golpeado, el hielo ahorca a las ánimas en pena
Desde este lugar el sol se avista lejano, ¿Qué lugar es este? No se con certeza...

En la niebla se distinguen las cabezas, una con grande hambruna devora
El cráneo de una serpiente, su lengua no ha de vituperar jamás...
Varias polillas brotan de la sangre de sus encías, ¡Oh! ansiedad roedora.


Minotauro: prisionero de Dite



Minos te ha castigado en mortal laberinto
de Creta eras ya polvo del recuerdo
ahora en el infierno cual sin instinto

buscas entre muros al cuerdo
te dejo en eternidad un momento
con los reyes para algún acuerdo.

Nimrod y el caos de las lenguas



Nimrod has levantado la torre
de la desgracia, ahora maldito 
el día del gran despiporre.

Gerión


Gigante Gerión que bajas

al tal llamado de mi maestro
llevamos de estas tierras lejas.

El bosque del dolor

Al contemplar la violencia manifiesta incrédulo me preguntaba
¿Cómo es posible que cada alma de una forma u otra dañe?
¡Miseria eterna para aquel reino que  ni  luz ni  virtud alcanzaba!

Después de ver a los que contra el prójimo actuaban
En un triste bosque seco y ralo me descubrí inmerso
De aquellas ramas sangre y lamentos juntos emanaban

¿Por qué razón,  hombre, tu vida, cual maleza cortas?
En tallo estéril retorcido y sin tu cuerpo has quedado
¿Valió tu osadía  lo que sin remedio ahora soportas?



Círculo del hambre

Aquí permanecen insaciables,
los espíritus que codiciaron deseos
sin poder saciar sus hábitos reprobables  

La morada de Dite


A la mitad del inframundo nuestros pasos se acercaban
Una ciudad amurallada entre tinieblas vislumbraba
A su alrededor, iracundos y violentos pululaban

Dite por nombre tenía la ciudad que ahí se alzaba
Fuego rojo, como en horno en el interior ardía
Infesto de almas, el río Estigia lo cercaba.



Los guardianes del séptimo círculo

Miré ahí a las criaturas  que resguardan el lago hirviente
Cual caldero puesto en fuego, así con tal violencia bulle
Como un coro los quemados se lamentan largamente

Mientras, los centauros tiran flechas a quién sin más huye
Quirón al frente, calma a éstos de fiereza indomable cuando
Uno ya ansioso lanza la saeta  que liberada por el aire fluye…




Las Erinas o hermanas del destino


Como guardias las Erinias en lo alto de la torre
Se encontraban, fijas las vistas en mi persona intrusa
De Megea me pegaba a aquél que me socorre

Tesífone y Alecto hijas de la perversión  profusa
También  en busca mía se encontraban y al mismo
Tiempo  iban chillando, convocando a la Medusa



Guardián Cerbero

 Guardián bestial, monstruo tricéfalo es Cerbero
Que en sus fauces a las almas despedaza
Y quien de gula peca encuentra aquí su fin certero

Pasa página, que en otro lado yo me hallé
Donde a los avaros, les toca la condena
Al cuarto círculo junto a mi guía entré

Plutón,  dueño de aquel foso   ahí aguardaba
“Papé Satán, papé Satán aleppa!”  era el reclamo
Que  por mi guía valor a mi  alma no menguaba



Caronte


¡Oh! Guardián del Estigia,
cuántos han pasado por tus aguas
responde, ¿quiénes gritan tal nostalgia?


En el bosque siniestro.


Perturbado por la espesura
del bosque, me volví a mí dulce guía:
Virgilio quién disipó mi pavura. 

El mapa del infierno

Años han pasado desde que  mortal
mire al Estigia de llanto eterno
almas cruzan el mundo infernal.

No ansíes conocer tal inferno.
Aquí les contaré cual mora,
círculo por círculo su gobierno.



lunes, 3 de diciembre de 2012

Inferno

PER ME SI VA NE LA CITTA DOLENTE,
PER ME SI VA NEL'ETTERNO DOLORE,
PER ME SI VA TRA LA PEDUTA GENTE,
GIUSTIZIA MOSSE IL MIO ALTO FATTORE:
FECEMI LA DIVINA PODESTATE, 
LA SOMMA SAPIENZA E 'L PRIMO AMORE,
DINANZI A ME NON FUOR COSE CREATE
SE NON ETTERNE, E IO ETTERNO DURO.
LASCIATE OGNE SPERANZA, VOI CH'INTRATE.

Yo y la visión pictórica de Radiohead


Escucho el eco desolador en el vacío
Pero la angustia rápida se desvanece
La semilla de luz ha estallado en el río

Sobre el comienzo de mi viaje
(Continuación)

Mis pensamientos, mis dudas entre sí revueltos,
De intriga me llenaba  al recorrer las tinieblas,
Al iniciar un viaje por un sin fin de tormentos

A cada foso recorrido, mi mente por distintas sendas
Iba y regresaba,  entre compasión y horror
Al lado mío Virgilio, de mis ojos quitaba las vendas

¿Ves ahora, hombre impío, lo que por pecador has logrado?
¡Qué tormentos! ¡Qué dolores!  ¡Qué  agonía te condena!
¡Cómo imploras las plegarias que hace mucho no te han dado!


Sobre el comienzo de mi viaje



Al infierno fui llegando sin saber por qué caminos
Maleza oscura sólo ante mí se revelaba
Indefenso, así estaba y esperando  los peligros

Más ¡oh fortuna! El terror se disipaba
En el alma que hacia mí venía,
Su nombre  y  su hacer  ya  imaginaba,

Virgilio, gran poeta, creador de tan excelsa historia
Fija  y viva aún estaba, ¡cuánta gloria en ella había!
¡Jamás borrarla  historia nadie en el mundo  podría!



Io, Dante Alighieri



Yo soy Dante Alighieri, de familia
noble, crecí en Venecia en los albores
de mil trecientos, recuerdo de melancolía.

Mi Venecia se encuentra corrompida
se encuentra bajo ataque de enemigos
querido lector os contaré mi vida 

Aquí veras pasajes varios,
de mi vida y de los hombres 
y como la senda de bríos

que por la escalera van las fiebres
 sanando con luz de escolta
divina, cual que orfebres

pulen vida tan revuelta
en tierra y fe a la deriva
así  mira y date una vuelta 

Crecí en Venecia punitiva,
Amor llegó y a  Beatriz, dama gloriosa,
con menos de nueve primaveras, mire altiva.

Perseguidos por vuestra sombra
así el mal persigue eterno al vivo
y no podéis escapar de tal umbra.

Vuelve y ve tu reflejo altivo
cúbrete si quieres ahora en vida
mas no creas de Fortuna evasivo.

Caen aquellos en las fosas infernales
es donde viven aquellos que traición
áspera y con cuerpos terrenales

!Oh hombre! cruel camino
tomas, sí, busca otro más
si quieres gozar de ser paladino.